Hay una creación de Allah que aparece citada en el Corán 63 veces, lo cual es suficiente para que nos detengamos ante ella, pensemos y reflexionemos. ¿Pero a qué creación nos referimos? Nos referimos al agua. El agua es un prodigio. Como dicen los sabios se compone de dos átomos de hidrogeno y uno de oxígeno. El hidrógeno tiene un rango de inflamabilidad muy amplio y el oxígeno, aunque no es inflamable soporta la combustión y ayuda a la inflamabilidad. Es decir, que ambas sustancias son fuego. Y con todo esto, cuando se unen sus componentes se convierten gracias a Allah en agua “Realmente cuando quiere algo, Su orden no es sino decirle: Sé, y esSura 36, Ya Sin aleya 82 Qué razón tiene quien dijo: “El juntar los dos opuestos es de los secretos de su poder. En esta nube hay agua y fuego”

El agua después de que se formase pasó a ser el fundamento de la vida y la causa de que la vida se desarrolle y subsistiese gracias a Allah, como dijo Allah Todopoderoso: “Y hemos hecho a partir del agua toda cosa viviente. “Sura 21, Los Profetas, aleya 30. Y dijo: “Y Allah creo todo ser vivo a partir del agua “. Sura 24, La luz, aleya 45. Con todo esto, ya podemos deducir el gran valor que tiene el agua para nosotros y para la vida. El agua es algo prodigioso y una bendición extraordinaria que nos ha concedido Allah con su gran misericordia. Si no hubiese agua, no existiría el ser humano ni habría vida animal, ni crecerían los sembrados, ni florecerían los jardines, ni darían frutos los árboles, ni habría ríos, etc .

La alabanza para Allah, gracias a Él esta sustancia bendita se encuentra con abundancia en nuestro planeta. Con ella se llenan los mares y los océanos que cubren más de un tercio de la superficie de la tierra. Y desde ella, gracias a los rayos del, sol sube vapor al cielo. Después, debido a la disminución de los grados de temperatura, se transforma en liquido otra vez. Luego, por el enfriamiento del aire que provoca la condensación del vapor del agua, se forman las nubes en la capa de atmosfera más cercana a la tierra. Y cuando Allah Todopoderoso y Altísimo quiere hacerlas descender a la tierra, envía sobre ellas los vientos para dirigirlas a donde quiere de los países. Es una misericordia de Allah con ellos y con su gente. Envía gotas de lluvia o copos de nieve o granizo. Y de esta agua que desciende del cielo, una parte se recibe para el beneficio inmediato o urgente. Otra, va a parar a los ríos o se infiltra a través de las rocas al interior de la tierra componiendo lo que se denomina aguas subterráneas. Y entre ellas, hay la que se almacena en las zonas solidas en forma de montañas de nieve o ríos congelados Dijo el Altísimo: “Y entre Sus signos está cuando ves la tierra humillada y entonces hacemos que caiga agua sobre ella, con lo que se estremece y se hincha realmente. Aquel que le da vida es Quien dará vida a los muertos; es verdad que Él tiene poder sobre todas las cosas” Sura 41, Se han expresado con claridad, aleya 39. Y dijo: “Allah es Quien envía los vientos que remueven las nubes, a las que extiende en el cielo como quiere y las fragmenta, y ves como la lluvia sale de su interior. Y cuando la hace caer sobre aquellos de Sus siervos, que Él quiere, se llenan de júbilo. A pesar de haber perdido ya la esperanza de que la hiciéramos caer sobre ellos. Así pues, mira las huellas de la misericordia a de Allah: Como le da vida a la tierra después de haber estado muerta. Él es quien devolverá la vida a los muertos ý El que tiene poder sobre todas las cosas” Sura 30, Los Romanos, aleyas 48-50.

No hace falta decir que el principal beneficiario de esta bendición, la bendición del agua, es el ser humano, pues del agua sale su alimento y bebida; con ella se limpia y lava, el agua riega sus cultivos y genera energía. El ser humano fue de la creación el primero que valoró este don en toda su medida y lo acepta con el reconocimiento y agradecimiento que merece quien se la concedió, y ese es Allah. Dijo el Altísimo:” Él es Quien hace que caiga la lluvia cuando ellos han perdido la esperanza y hace Su misericordia extensa. Él es el Amigo, el Digno de alabanza “Sura 42, La consulta, aleya 28. Y dijo: ”Él es Quien envía los vientos como anuncio previo a Su misericordia. Y hacemos descender del cielo un agua pura (y purificante) para vivificar con ella una tierra muerta y dar de beber a los animales del rebaño y a muchos seres humanos de los que hemos creadoSura 235, El Discernimiento, aleyas 48 y 49. Y dijo:Él es el que hace que caiga agua del cielo para vosotros, por ella tenéis de qué beber y arbustos en los que apacentáis. Con ella hace que crezcan para vosotros cereales, aceitunas, palmeras, vides y todo tipo de fruto ; es cierto que en eso hay un signo para gente que reflexiona” Sura 16, La abeja, aleyas 10, 11

Sin embargo, mucha gente debido a que están acostumbrados a la presencia entre ellos de esta bendición le dan poca importancia y valor, son negligentes en su uso, y olvidan agradecer esta bendición; y eso esconde un peligro, y es que se elimine este gran don para aquellos que se despreocupan de él y olvidan agradecerlo como es debido, como determinó Allah Altísimo en sus palabras: “Y cuando os anunció vuestro Señor: Si sois agradecidos, os daré aún más, pero si sois desagradecidos… Es cierto que Mi castigo es inmenso” Sura 14, Abraham, aleya 7. Y por esto dijo el Altísimo recordando la obligación del agradecimiento: “¿Os habéis fijado en el agua que bebéis? ¿Sois vosotros los que la hacéis caer de la nube o somos Nosotros? Si hubiéramos querido la habríamos hecho salobre. ¿Por qué, pues no agradecéis?Sura Lo que ha de ocurrir, aleyas 68-70. Y dijo advirtiéndonos de su perdida: “Di: ¿Qué haríais si vuestra agua se quedarla en la profundidad de la tierra? ¿Quién podría traeros agua de manantial? Sura 67, La soberanía, aleya 30.

Sí, ciertamente el agua se encuentra entre las bendiciones que pide y pedirá el ser humano, es más, ella es la primera según las palabras del Altísimo: “Y ese día se os preguntará por los momentos de dicha que habéis tenido”. Sura 102, La rivalidad, aleya 8. Y en el hadiz:” Lo primero que se le preguntará al siervo el Día de la Resurrección sobre las bendiciones que ha recibido es: ¿No le dimos salud a tu cuerpo y te proporcionamos agua fría para beber? Narrado por al-Termidhi y autentificado por al-Albani. Por esto, nuestro Profeta -Allah bendiga y salve a él y su familia- celebró la gracia que Allah les había concedido, la exaltó y agradeció. ¡Cuántas invocaciones realizó agradeciéndola o pidiéndola¡ Y de entre esas invocaciones, cuando terminaba de beber agua decía: “La alabanza para Allah que la hizo potable, dulce por Su misericordia y no la hizo salada por nuestros pecados” Ibn Abu Hatem.

Por otra parte, el agua es un soldado de los soldados de Allah. De la misma manera que la hizo descender Allah Altísimo para vivificar la tierra y como misericordia para su gente; la envió como castigo para los tiranos, los injustos y los depravados. ¿Acaso no fue así cuando fue aniquilado el pueblo de Noé como resultado del diluvio? ¿Y no ocurrió cuando el pueblo de Saba desapareció a causa de las inundaciones por el colapso de la presa de Ma`rib? Dijo Allah Altísimo: “Antes que ellos ya habían negado la verdad la gente de Nuh (Noé). Negaron a nuestros siervos y dijeron: Es un poseso. Y lo rechazaron con amenazas. Entonces rogó a su Señor: ¡Me han vencido, auxíliame! Y abrimos las puertas del cielo con un agua torrencial. E hicimos que la tierra se abriera en manantiales y se encontraron las aguas por un mandato que había sido decretado. Y lo llevamos en una embarcación hecha de tablas y clavos que navegó bajo Nuestra mirada. Recompensa para el que había sido negado. La hemos dejado como un signo. ¿Hay quien recapacite? Sura 54, La luna, aleyas 9-15 Y dijo: “Realmente la gente de Saba tenía un signo en donde habitaba: Dos jardines a ambos lados: derecha e izquierda. ¡Comed de la provisión de vuestro Señor y agradecedle¡ Es una buena tierra y Él es un Señor indulgente. Pero se desviaron y enviamos contra ellos la inundación del dique y convertimos los dos jardines en otros con arbustos espinosos y amargos, tamariscos y algún azufaifo. Así les pagamos por haber sido desagradecidos. ¿Acaso recibe ese pago alguien que no sea ingrato?” Sura 34, Saba, aleyas 15 a 17. ¡Y el feliz es quien deja que otro le prevenga! Nosotros escuchamos y contemplamos en los últimos años noticias de inundaciones en las que se ahoga la gente, se arruinan y pierden todas las propiedades, viéndose obligados a dejar sus pueblos y casas quien se salva de morir ahogado; mientras que en otros sitios, por el contrario, se quejan de la sequía que azota el lugar donde viven, lo que hace que sufran hambre, pierdan sus ganados y empeoren terriblemente su situación en esta vida. Esto indica que el agua obedece los designios de Allah y es una advertencia a la gente para que recapaciten y reconsideren sus malos comportamientos con respecto a esta bendición que Allah nos ha dado.

Lo que indica que estos cambios, tanto en el tiempo de lluvias o en la caída de lluvias torrenciales que provocan graves inundaciones, o en la privación de algunos países de ella, tienen como motivo la mala conducta que llevó a cabo el ser humano hacia las bendiciones que Allah nos ha concedido en general, y hacia la bendición del agua en particular. Dijo el Imam Ali –Allah esté satisfecho de él:-.“Una calamidad no desciende sin un pecado; y no se levanta sin arrepentimiento” Y las palabras de Muyahed –Allah tenga misericordia de él- “Las animales maldicen a los pecadores de los hijos de Adán cuando el año se hace insoportable y la lluvia les atrapa. Dicen: esto es una desgracia debido a la desobediencia de los hijos de Adán”. Esta realidad se ve aclarada todavía más por las palabras del Profeta – Allah le bendiga y salve– “¡Oh congregación de emigrantes (muhajirin)! Hay cinco cosas con las seréis probados, y busco refugio en Allah para que os deis cuenta de ellas. La inmoralidad nunca aparece en un pueblo a tal grado que la cometan abiertamente, pero plagas y enfermedades que nunca fueron conocidas entre sus predecesores se extenderán entre ellos. No hacen trampas en pesos y medidas, sino que habrá una calamidad severa y la opresión de sus gobernantes. No retienen el zakat de su riqueza, pero la lluvia será retenida del cielo, y si no fuera por los animales ninguna lluvia caería sobre ellos. No rompen el pacto con Allah y su mensajero, pero Allah permitirá que sus enemigos les dominen y tomen algo de lo que está en sus manos. A menos que sus líderes gobiernen de acuerdo con el Libro de Allah y busquen todo el bien de lo que Allah ha revelado, Allah hará que luchen entre sí” Ibnb Mayah, al Bayhaqi, al Hakem, hadiz Ibn Omar. Algunos lo consideran un hadiz “hasan” o bueno y otros un hadiz débil.

Allah tenga misericordia del poeta avisador cuando dice:

Si estás en una bendición, cuídala //Pues los pecados quitan las bendiciones

Y colócala en la obediencia del Señor de los siervos//Pues el Señor de los siervos es rápido para venganza

Entre las malas acciones que lleva a cabo el ser humano en cuanto al preciado don del agua que Allah Altísimo nos concedió, tenemos el derroche en su uso. Por esto decimos: el agradecimiento por este precioso don del agua no se debe limitar al agradecimiento de palabra sino que debe extenderse al buen uso que del agua tenemos que hacer, evitando su derroche, y esto es lo que nos indica nuestros Señor Altísimo en su Libro:”¡Hijos de Adán! Comed y bebed, pero no os excedáis. Es cierto que Él no ama a los que se exceden” Sura 7, Al-A´raf, aleya 31. Se refiere al despilfarro en cualquier cosa, incluido el derroche en el uso del agua, tanto en su uso en los asuntos corrientes de nuestra vida diaria, como lavar platos, lavar la ropa, limpiar las casas o los coches: o por ejemplo el agua que se utiliza en las piscinas privadas y se renueva cada día o regar las superficies verdes y las plantas decorativas innecesarias o que no tienen ninguna prioridad. También esto lo podemos aplicar al agua que utilizamos al prepararnos para hacer los actos de adoración con el “wudu” o el “ghusl”. Es más, en el asunto de la adoración especialmente debemos seguir el ejemplo de nuestro Profeta – Allah bendiga y salve a él y a su familia- y su manera de proceder a la hora de hacer el “wudu” con un “almud” (medida equivalente a unos 5 litros, o un poco más), es decir, con un poco de agua; y utilizaba un “Sa`a”, es decir 4 almudes para hacer el “ghusl”. Abdellah ben Ámr -Allah esté satisfecho de él y de su padre- nos narró que el Profeta – Allah le bendiga y salve- pasó junto a Saad mientras él estaba haciendo la ablución y le dijo: ”¿Qué es este despilfarro, Saad? Saad le respondió: ¿Acaso al hacer el wudu hay despilfarro, Enviado de Allah? Le respondió: Si, incluso si lo estuvieses haciendo en un rio” (La serie correcta del sheyj al-Albani. Número 7/860). Y no dijo eso –Allah bendiga y salve a él y a su familia- por la escasez de agua que hay en el desierto, como quizás esto nos lleve a pensar, sino como consideración y exaltación del don que Allah nos concedió y para evitar que con su derroche acabemos esquilmándola, y para dejar el excedente para quien más lo necesite.

Por último, solo nos queda -y nosotros estamos necesitados de la misericordia de Allah-, que invoquemos rogando del Señor misericordioso la respuesta a nuestras peticiones. ¡Oh Allah, concede el agua a tus siervos y a tus animales, extiende tu misericordia y revive este lugar muerto! ¡Oh Allah, danos lluvia y no nos hagas entre los desesperados¡ Allah, te pedimos a ti gran perdonador. ¡Envía sobre nosotros el cielo con lluvias abundantes! ¡Oh Allah, danos abundante lluvia, lluvia beneficiosa! ¡Oh Allah, danos lluvia con misericordia, no nos des lluvia con tormento! Que no haya destrucción ni ahogados. ¡Oh, el más misericordioso, Señor de los mundos! Amen. Alabado sea tu Señor, Señor de la gloria por encima de lo que le atribuyen, y la paz sea sobre los Enviados, La alabanza para Allah, Señor de los mundos.