La alabanza para Allah, Señor del Universo. Que las oraciones y la paz recaigan sobre el más noble de los enviados, sobre su familia y todos sus seguidores.
La ley islámica se ha caracterizado por proteger los derechos de los huérfanos, de los pobres y las viudas, y los ha colocado bajo su protección y al cuidado de la sociedad islámica, siendo los musulmanes solidarios con todos ellos, tanto moral como materialmente, aumentando los derechos que esta clase social tenía anteriormente. El Enviado de Allah –Allah le bendiga y salve-, exhortó a toda la comunidad musulmana (umma) a que satisfaciesen las necesidades de estas personas y dijo: “Obtendréis mi complacencia si poneis vuestro cuidado y esmero al servicio de los débiles. Ayudadme a corresponderlos y se os proveerá y se os ayudará en la victoria por vuestros débiles.” Narrado por Abu Dawd Y dijo el Enviado de Allah – Allah le bendiga y salve- “Quien procura cumplir con las necesidades de las viudas y huérfanos es como aquel que lucha por la causa de Allah, o como aquel que reza voluntariamente por la noche y ayuna por el día” Por lo tanto, el Enviado de Allah -Allah le bendiga y salve- elevó hasta un grado inimaginable el rango de aquel que se preocupa por el asunto de ellos.
Dijo el Enviado de Allah –Allah le bendiga y salve- “Ves a los creyentes en el afecto, compasión y amabilidad como un solo cuerpo. Si una parte se queja porque está aquejada de algo, el resto del cuerpo reacciona y acude a la par con desvelo y fiebre” Narrado por al-Bujari, Muslem y Ahmad.
Queridos hermanos y hermanas en el Islam: La verdadera religión. la religión recta se ha preocupado por el tema de la solidaridad social y le ha prestado una especial atención, ya que la solidaridad juega un importante papel en el fortalecimiento de los vínculos de la sociedad y nos empuja a la cooperación entre todos. Si prevalece el espíritu de la cooperación y el cariño entre los miembros de la sociedad, entonces desaparecerán los odios y los rencores, y la sociedad podrá sobreponerse a todas las dificultades y progresar y desarrollarse dirigida por los puros y fieles.
La misericordia es la primera obligación humana que tenemos hacia los necesitados: huérfanos, niños, ancianos, mujeres, indigentes, sirvientes y personas que han sido tratadas injustamente. Esta misericordia se representa en el cariño por aquellas personas, en compadecerse de ellos, en ayudar a aliviar sus dolores e intentar eliminar el daño, la injusticia y la agresión que sufren, procurando aliviarles con todos los medios posibles. Y esto es lo que impuso el Islam y lo convirtió en la vía para conseguir la satisfacción de Allah y su cariño, pues Allah tiene misericordia de sus siervos compasivos.
En cambio, hay corazones que se endurecieron y rechazaron llevar a cabo esta obligación, pero estos corazones tienen que saber que quizás los débiles de hoy serán los fuertes mañana, y como alguien dijo: “No insultes a los pobres, tal vez un día te arrodilles mientras la eternidad lo ha levantado, y los días se suceden”. Dijo el Enviado de Allah: “La misericordia sólo se quita a aquel que está destinado a la miseria”.
Abd Allah ben ¨Amr ben al al-`As escuchó al Profeta – Allah le bendiga y salve- decir: “ “Tened misericordia y habrá misericordia para vosotros; perdonad y seréis perdonados. Perdona y Allah te perdonará”. Las palabras del Profeta –Allah le bendiga y salve-: “Tened misericordia y habrá misericordia para vosotros” indican que la misericordia es una de las características del Creador con las que envolvió a Sus siervos, y ciertamente Él tiene compasión de sus siervos misericordiosos y Él es el Gran Perdonador y le gusta que se perdonen los siervos unos a otros. El Profeta -Allah le bendiga y salve- amenazó con la desgracia a los que no siguen las ordenes de Allah y no se comportan como deben comportarse. Son aquellos que escuchan las palabras y no hacen caso, no les interesa. Y asimismo amenaza a los que persisten en los pecados y no se arrepienten. Dijo el Altísimo: “Hemos creado para el Yahennnam muchos genios y hombres. Tienen corazones con los que no comprenden, ojos con los que no ven y oídos con los que no oyen. Son como animales de rebaño o peor aún en su extravío. Esos son los indiferentes” Sura 7, al-A`raf, aleya 179. Los que no prestan atención a lo que hay a su alrededor, en el cosmos y en la vida de señales de Allah, o que no ven los sucesos que acontecen, esos son, en su extravío del camino, como el ganado, o peor aún, pues mientras que el ganado tiene predisposiciones innatas que les guía; en cambio, los genios y los hombres -a los que Allah dotó de un corazón consciente, de ojos que ven y oídos que recogen sonidos e informaciones- cuando no abren sus corazones, sus ojos y sus oídos, y pasan sin prestar atención, entonces ellos están más extraviados que el ganado que confía en sus predisposiciones innatas gracias a las cuales se guían. Ciertamente el Islam se preocupó por diferentes motivos por el asunto de los débiles:
El primer motivo: porque son personas y todo ser humano tiene derecho a que se preserve su dignidad a vivir en una sociedad que le valore y le respete. Si eso es así, trabajará en el futuro con gratitud intentando devolver a la sociedad que le acogió el bien que le ha hecho, apartándose del robo, la trampa y el fraude, pues eso sería ingratitud.
Segundo: porque ellos, los débiles, representan la mayoría en toda sociedad, y la sociedad sana necesita protegerlos de una forma ejemplar ya que son una fuerza humana significativa. Cuando la sociedad no ejerce su protección de una forma correcta, entonces algunos de sus miembros se podían rebelar, resentidos con la sociedad, destrozarían y no construirían, provocarían la corrupción en la tierra y no procurarían el bien ..
Tercero: Si protegemos a estas personas, protegemos a la sociedad de disturbios y movimientos que podrían amenazar su existencia y su unidad. Asimismo, alejamos la posibilidad de odio resultante por el abandono que han sufrido, y protegemos a la sociedad del mal de la rebeldía y la discordia. Allah maldice a quien despierte esa discordia que está dormida. Entre las cosas buenas que ofreció el Islam para ellos está que prohibió la injusticia que se cometía con los huérfanos y las mujeres, pues en la yahilía se negaban a que estas personas heredasen con el pretexto de que no combatían, y el Islam abrogó esta injusticia y les dio sus derechos, estableciendo para ellos el derecho de la herencia. En ese momento descendieron las palabras del Altísimo referidas a la herencia de las mujeres: “A los hombres les pertenece una parte de lo que dejen los padres y los parientes, y a las mujeres les pertenece una parte de lo que dejen los padres y los parientes, sea poco o mucho. Es una parte preceptiva” Sura 4, Las mujeres, aleya 7. Y ordenó –alabado sea- en cuanto a la herencia de los huérfanos que se les diese los bienes a los que tenían derecho. “Dad a los huérfanos los bienes que sean suyos y no pongáis lo malo en lugar de lo bueno. No os aprovechéis de sus bienes juntándolos a los vuestros, porque eso sería una grave injusticia” Sura 4, Las mujeres, aleya 2. Y el Islam consideró la agresión a los bienes de los huérfanos como uno de los delitos que provocará que su autor entre en el Infierno. Dijo El Altísimo: “Es cierto que quienes se coman los bienes de los huérfanos injustamente entrarán llenado sus vientres de fuego y entrarán en un Fuego abrasador” Sura 4, las mujeres, aleya 10.
Hemos mencionado algo que mueve los corazones y los sentimientos… y así como trates te tratarán. El islam consideró un insulto que no se invitase a los pobres y a los huérfanos a los banquetes, y es que abstenerse de ayudar al necesitado es kofr y negación de la religión. Dijo el Altísimo: “¿Has visto a quien niega la Rendición de Cuentas? Ese es el que desprecia al huérfano y no exhorta a dar de comer al mendigo. Pero,¡ay de aquellos que rezan¡ Siendo negligentes con su oración. Esos que hacen ostentación y niegan la ayuda imprescindible” Sura 107, La ayuda imprescindible, aleyas 1-7 El Islam pide que se honre al huérfano, a las viudas y a los necesitados. Dice el Enviado de Allah -Allah le bendiga y salve- “Yo y el tutor del huérfano estaremos en el Paraíso así (Señalando sus dedos índice y corazón y separándolos)”. Y dijo: “El que se preocupa por las viudas y por los necesitados es como el que lucha en el camino de Allah” El Islam después de que eliminase la injusticia que se cometía con ellos y les diese el rango que merecían como seres humanos, les honró y ahora tienen su lugar en la sociedad. A aquel que no tenía bienes, el Islam le concedió un derecho sobre los bienes de los ricos: “Y de sus riquezas dan un derecho correspondiente al mendigo y al indigente” Sura 70, Los grados de elevación, aleyas 24, 25 Y este derecho sobre los bienes de los ricos que Allah puso como obligatorio para los necesitados debe cubrir el alimento, vestido y lugar donde habitar, y el resto de las cosas necesarias de las que no puede prescindir el ser humano para vivir.
Estas enseñanzas extraordinarias han dejado una huella profunda en los corazones de los débiles y ahora sienten que manos cariñosas se apiadan de sus dolores, y esto les hace amar la sociedad en la que viven y hace que confíen en ella, abriéndose ante ellos la puerta de la esperanza y el trabajo, y podrán conseguir los que deseaban sin tener que apartarse de sus objetivos. De esta manera, prevalece el espíritu del cariño y de la misericordia, crecen los sentimientos de pureza y ternura, y a todos cubre la sombra de la paz y la armonía sintiendo el sabor del descanso y el bienestar. La sociedad que proporciona estos principios nobles será la más feliz de las sociedades y la más cercana a la estabilidad y la felicidad, será la que tiene más derecho en cuanto a soberanía y a dirigir al pueblo, y la mejor de las comunidades para el ser humano.
Oh Allah, muéstranos la verdad y concédenos ser sus seguidores. Muéstranos lo falso y apártanos de ello. Allah ayuda a los débiles en todo lugar. Oh Allah, Tú que escuchas las invocaciones y gemidos de los enfermos y heridos. Tú que escuchas el llanto de los niños y viudas, ves su rango y ante ti no se te oculta nada de sus asuntos. Tú eres más misericordioso con ellos que ellos mismos. Oh Allah, actúa contra los tiranos, déspotas que nos saquean y arrasan a sangre y fuego, corrompiendo la tierra. Oh Allah, castígalos de una forma poderosa, Tú que puedes.
Bendice a nuestro Señor Mohammad, a su familia y a todos sus compañeros. A sus seguidores y a los que le siguen con el bien hasta el Día del Juicio. Amen. Alabado seas Señor, Señor del poder por encima de lo que atribuyeron. La paz sea sobre los enviados y la alabanza para Allah, Señor del Universo.