Dijo Allah Altísimo:” Y no os acerquéis a la riqueza del huérfano, si no es con lo que más le beneficia, hasta que no haya alcanzado la pubertad” Sura 17, El viaje nocturno, aleya 34. Éste es el sexto de los diez mandamientos y el tema que trata es la prohibición a los allegados de coger la riqueza del huérfano, excepto que sea para aumentarla o mejorarla. El huérfano en los seres humanos es aquel que perdió a sus padres antes de alcanzar la mayoría de edad; mientras que en los animales se refiere a aquel que perdió a su madre. El islam, como vemos en este hadiz: “Cada musulmán tiene prohibido a otro musulmán su sangre, su honor y su riqueza”, prohíbe terminantemente que se viole el derecho de las personas a sus bienes, de ahí que se prohíba coger los bienes del huérfano excepto que esto supusiese aumentar la riqueza del niño. Está prohibido el simple acercamiento a su riqueza. ¡Cómo es posible que una persona utilice el dinero de un pobre huérfano si no es en beneficio de ese niño! ¡Cómo es posible que haya personas que puedan utilizar y derrochar ese dinero sabiendo que el huérfano es débil debido a la pérdida del padre, que era su defensor y protector, y es débil para gestionar su dinero y débil para protegerlo!

El Islam ha surgido entre otras cosas para proteger a los débiles y oprimidos de los injustos y opresores. Y entre los más oprimidos estaban las mujeres y los huérfanos. Los huérfanos se veían expuestos a veces a la injusticia y a la iniquidad de tutores y albaceas. Dice un hadiz:” Yo perseguiré a todo aquel que prive de sus derechos a dos colectivos de personas débiles: los huérfanos y las mujeres” Ibn Maya, Ahmad y al Nasa`i. Esto viene a decir que nos advierte de una forma clara y tajante que no cometamos ninguna injusticia o agresión contra sus derechos. Dijo el Altísimo: “Dad a los huérfanos los bienes que sean suyosSura 4, Las mujeres, aleya 2. Es decir, entrégales sus bienes y cumple con sus derechos plenos y abundantes cuando los huérfanos ya hayan alcanzado la época del “sueño húmedo”, o sea, la pubertad. “Y no pongáis lo malo en lugar de lo buenoSura 4, Las mujeres, aleyas 2. Dijo al-Sadi –Allah tenga misericordia de él-: “Uno de ellos cogía la oveja gorda del ganado del huérfano y la sustituía por la oveja delgada, y decía: oveja por oveja, Y cogía el dirham bueno, dejando en su lugar el dirham falso, y decía: dirham por dirham. “La sura 4 en su aleya 2 continua diciendo: “No os aprovechéis de sus bienes juntándolos a los vuestros”, que, según Muyahed, Ibn Yubeir y otros, viene a decir que no lo mezclen con sus bienes propios y los gasten. Continua Allah diciendo “Es cierto que quienes se coman los bienes de los huérfanos injustamente, estarán llenando sus vientres de fuego y entrarán en un Fuego abrasador “, Sura 4, Las mujeres, aleya 10. Es decir, que si ellos utilizaran los bienes de los huérfanos sin un motivo valido, comerán, inexorablemente, el fuego que arderá en sus vientres el día de la Resurrección.  Y esto se confirmó en el sahihein de hadiz de Abu Hurayra –Allah esté satisfecho de él- Dijo el Profeta – la paz y las bendiciones recaigan sobre él -: “Alejaos de las siete aniquiladoras, Le preguntaron: Enviado de Allah, ¿cuáles son? Respondió:  la idolatría asociando algo a Allah, la brujería, quitar la vida a una persona en los supuestos que Allah ha prohibido, a excepción de lo que sea legitimo hacerlo, comer de la usura, aprovecharse de los bienes del huérfano, escapar al iniciarse la batalla y difamar a las mujeres honestas, creyentes e inocentes”

Estos elocuentes y claros textos, con la amenaza severa de este augurio, dejaron en los corazones de quienes tuvieron bajo su tutela huérfanos un temor extraordinario de que sus almas se viesen afectadas por eso. Narró Ibn Yarir, tomado de Ibn Abbas,- Allah esté satisfecho de ambos- que cuando se revelaron las aleyas: “ Y no os acerquéis a la riqueza del huérfano, si no es con lo que más le beneficia, hasta que no haya alcanzado la pubertad” y  “Es cierto que quienes se coman los bienes de los huérfanos  injustamente, estarán llenado sus vientres  de fuego y entrarán en un  Fuego abrasador” , a partir de ahí quien tenía un huérfano, empezó a no tocar la comida de éste ni su bebida y pasó a preferir su comida propia sin tocar el legado del huérfano hasta que lo coma o se estropee. Eso les aturdió de tal manera que se lo mencionaron al Profeta- la paz y las bendiciones recaigan sobre él -. Entonces hizo descender Allah Altísimo las siguientes aleyas “Y te preguntan sobre los huérfanos. Di: es bueno que miréis por su interés““Y si os mezclaseis con ellos son vuestros hermanos “ Sura 2,  La vaca, aleya 220. Es decir que, si mezclaseis vuestra comida con la comida de ellos y vuestra bebida con la bebida de ellos, pues está bien, ya que son vuestros hermanos en la religión.  “Allah distingue entre el que corrompe las cosas y el que las mejora”. lo cual significa que distingue entre quien tiene intención de hacer el mal y quien tiene intención de hacer el bien “Si Allah quisiera os lo haría difícil “. Es decir, que si Allah -alabado sea- quisiera, podría hacer que lo pasaseis mal y poneros en apuros, pero Él ha sido generoso con vosotros y lo atenuó, permitiendo que mezclaseis con sus bienes, pero siempre y cuando que redunde en beneficio de los huérfanos. Allah es Todopoderoso y Sabio. Sura 2, La Vaca, aleya 220. Exegesis de Ibn Kazir 1/256.

Los ulemas han deducido de esta autorización de mezclarse con los huérfanos – pero siempre teniendo como objetivo el mirar por ellos y hacerles el bien – una autorización para gestionar los bienes del huérfano con la venta, la compra, la especulación y el comercio, si fuese eso para su bien. Y discreparon en lo referente a si el tutor o el albacea podría comprar para sí mismo con los bienes del huérfano. Algunos afirmaron que no era lícito por la sospecha que podría acompañar este acto. Otros afirmaron que, si era posible, pero siempre y cuando se obtuviese una ganancia y esta redundase a favor del huérfano. También hay voces que declararon, apoyándose en la autorización general que aparece en aleya, que era absolutamente posible, pues Allah lo autorizó al hablar de la mezcla y dio plenos poderes a los tutores y a los custodios con respecto a sus depósitos con las palabras siguientes” Allah distingue al que corrompe las cosas del que las mejora (Sura 2, La Vaca, aleya 220). El imam Tawus Ibn Kaysan -Allah tenga misericordia de él-, cuando se le pregunto por algo del asunto de los huérfanos leyó” Allah distingue al que corrompe las cosas del que las mejora”. Lo que significa que Allah, alabado sea- conoce quien quiere hacer mal y quien quiere hacer el bien, y será recompensado cada uno de ellos según haya sido su intención y según haya obrado.

En otro contexto dijo Allah Altísimo “No deis a los incapaces la riqueza que Allah ha dispuesto para vuestro mantenimientoSura 4, Las mujeres, aleya 5. Esto nos indica la prohibición de que los incapaces gestionen bienes que Allah ha concedido, es decir el sustento con el que se vive. Hay diversos tipos de incapacidad. Está la incapacidad del menor; la incapacitación por la locura; y la incapacitación por la mala gestión de los bienes debido a incapacidad mental o deficiencia religiosa; o la incapacitación o prohibición debido a la insolvencia, si las deudas rodeasen a un hombre y disminuyesen sus bienes con los que podría pagar, entonces, si pidiesen los acreedores que se le incapacitase, se le incapacitaría. En este marco de los incapacitados está el tema de los huérfanos. Dijo Allah Altísimo “…. si encontráis en ellos sensatez y rectitudSura 4, Las mujeres, aleya 6. Es decir, virtudes en su religión y capacidad de preservar sus bienes. “….Entregarles sus bienes. No los malgastéis incurriendo en delito y adelantándoos a que se sean mayoresSura 4, Las mujeres, aleya 6. Es decir, despilfarrando y tomando la iniciativa antes de que sean mayores. “….El que sea rico que se abstenga de ellos, y el pobre que gaste según lo reconocido”. La gente de la exegesis dijo: Estas palabras descendieron para el tutor de los huérfanos. Si no está necesitado de los bienes del huérfano, pues entonces no malgastará de él nada, y si está necesitado pues gastará según lo reconocido.

Ciertamente esta prohibición está dirigida para aquel que tiene bajo su tutela a un huérfano, y le indica que sólo debe gestionar esos bienes hasta que el muchacho alcance la mayoría de edad, buscando siempre, eso sí, el interés del huérfano y el crecimiento de lo que tiene bajo su tutela De ahí las palabras del Altísimo: “…. si encontráis en ellos sensatez y rectitud, entregarles sus bienes”. Hablando de cuando se alcanza la pubertad y cuando finaliza la tutela, dice el hadiz: No se completa después de un sueño húmedo ni se calla de un día para otro (Abu Dawd y al-Bayhaqi, con edición crítica de al–Albani.) Pero la sociedad también es responsable si viera que no se cumple bien la tutela de este huérfano o hay injusticia en el comportamiento que se tiene con él o hay desviación de su dinero, en esos casos debe intervenir en beneficio del huérfano. y esto es lo que viene a significar de forma general la expresión “No os acerquéis a los bienes del huérfano” Por eso, Allah Altísimo recordó a su Profeta – la paz y las bendiciones recaigan sobre él y su familia- en la sura De la claridad de la mañana que se debía acoger al huérfano, ser su guía ante la confusión y evitarle la pobreza: ¿Acaso no te halló huérfano y te amparó?. ¿Y no te halló perdido y te guió?, ¿Y no te halló pobre y te enriqueció?  Sura 93, La claridad de la mañana, aleyas 6, 7, 8, Entonces volvió y le mandó, -con los musulmanes detrás de él- acoger a todo huérfano y que no se cometiese injusticia con ellos. ¡Hay suficiente para todo solicitante y no se debe ahuyentar! Dijo el Sublime. “Por eso, no abuses del huérfano ni ahuyentes al mendigoSura 93, aleyas 9 y 10. Allah nos hizo a mí y a vosotros con conocimiento y capacidad de razonar, actúa pues y sé leal. Y fue aceptado y me beneficia a mí y a vosotros el dikr de Allah y la guía del Profeta. ¡Qué Allah nos conceda el perdón a mí, a vosotros, a nuestros padres, a vuestros padres y al resto de los musulmanes! ¡Pedidle perdón y os perdonará! Él es el Gran perdonador, el Misericordioso.

Ciertamente, el huérfano, debido a la pérdida en su infancia de su custodio y protector, está expuesto a peligros y múltiples desgracias si no interviene la gente del bien de la sociedad para compensarle por lo que perdió y llevar a cabo su crianza y protección, tratándole bien hasta que alcance la pubertad. Y a esto es a lo que nos invita nuestra religión, el Islam, en este mandamiento. Con eso se creará un bien común para el huérfano y toda la sociedad y dominará en la sociedad un clima de hermandad, cariño y solidaridad. La responsabilidad con el huérfano garantiza crear una generación virtuosa libre de problemas y de la atadura psicológica que trae como consecuencia el fenómeno de los niños de la calle y lo que conlleva de desgracias y delitos. Asimismo, el comportamiento responsable de la sociedad con el huérfano traerá la estabilidad de la sociedad y un aumento de los porcentajes de crecimiento económicos y sociales.

Además de la virtud que tiene criar y proteger a un huérfano y lo que traerá la recompensa para aquel a quien Allah bendijo con eso -¡y nos bastaría con eso!- se debe citar que el cuidado del huérfano nos proporciona un acercamiento al Profeta – la paz y las bendiciones recaigan sobre él- en el Paraíso. Dice el hadiz “Yo y el que cuida a un huérfano estaremos en el Paraíso así, y lo dijo señalando con el dedo índice y el dedo corazón separándolos. (Al Bujari, hadiz narrado por Sahl b. Saad al-Saedi – Allah esté satisfecho de él-. Dijo el imam Ibn Hayar – Allah tenga misericordia de él- :Eso significa que entre el Profeta – la paz y las bendiciones recaigan sobre él- y el que cuida a un huérfano  habrá la diferencia que existe entre los dos dedos  En otro hadiz:  “Quien dé de comer y beber a un huérfano de padres musulmanes hasta que no lo necesite tendrá sin duda el Paraíso” , (Extraído por Hasan con un buen isnad, como dijo al-Nadari; y lo citó al-Albani  en  Sahih  al-targhib wa al tarhib; narrado también por al-Tabari de hadiz de  ibn al-Dará – Alah este satisfecho de el –): “Acudió al Profeta un hombre que se quejaba de la dureza de su corazón  Él le dijo: ¿Quieres que tu corazón se ablande y te des cuenta  de tu necesidad? Pues, ten piedad del huérfano, límpiale la cabeza y aliméntale con tu comida, entonces tu corazón se ablandará y te darás cuenta de tu necesidad”. Dijo al-Albani en Sahih al targhib wa al tarhib: Esto incluso si fuese el huérfano extranjero. Si fuese cercano, su atención y el bien que se debe hacer a él es doble caridad y vinculo. Y entre las cosas positivas inmediatas que va a traer sobre el bienhechor está el que se extenderá sobre él la gracia divina y que será bendecido en su vida.

A pesar de que cuando hablamos de huérfano entendemos normalmente que es un niño/a que ha perdido a sus padres, este significado es más amplio y engloba a todo niño que está solo, débil, necesitado, incluimos en ese grupo a los niños abandonados, los niños de padres desconocidos y los niños vagabundos etc. Hacer el bien a ellos es como hacer el bien a los huérfanos, sin ninguna diferencia. Dijo el Altisimo: ¿No es el bien la recompensa del bien? Sura 55 El misericordioso, aleya 60. Y Dijo – alabado sea-: “Sin embargo no ha emprendido la cuesta. ¿Y cómo hacerte saber qué es la cuesta? Es liberar a un siervo o alimentar en un día de necesidad a un pariente huérfano o a un mendigo polvoriento. Y es ser de los que creen, se aconsejan la paciencia y se aconsejan la piedad. Esos son los compañeros de la derechaSura, 90, El territorio, aleyas 11 a 18. Y dijo el Profeta- la paz y las bendiciones recaigan sobre él – “El que procura ayudar a la viuda o al huérfano es como el que lucha por la causa de Allah o el que se levanta por la noche, el que ayuna durante el día.” Narrado por al Bujari.  Hadiz de abu Hurayra –Allah este satisfecho de él-.

¡Allah es suficiente para nosotros. ¡Qué excelente guardián! Allah es al que se pide ayuda. Alabado sea tu Señor Todopoderoso por encima de lo que le atribuyen. La paz sea sobre sus enviados y alabado sea el Señor de los mundos